martes, 27 de marzo de 2012

DNI para la Cuaresma


En este tiempo de cuaresma revisemos nuestra vida como cristianos, como discípulos de Cristo. Este DNI que, a continuación, te muestro, te ayudará a recorrer con Jesús el camino del Calvario… Sólo así, podrás, unos días después, reconocerle en el camino de Emaús y gozar para siempre de su compañía.

Conviértete. De corazón. No te preocupes por la fachada, por el envoltorio. Jesús te conoce de sobra; no intentes engatusarlo con “penitencias de todo a cien.” Rasga tu corazón, no tus vestiduras.

Ubícate. Utiliza para tal fin “el GPS de los evangelios.” En especial, el pasaje de Lucas (4,1-13). Acude al desierto donde te esperan un montón de dudas, de tentaciones… Pero no te des a la fuga, Jesús no te dejará solo, si confías en Él, saldrás victorioso.

Ayuna. Levántate todos los días con hambre de justicia. Acude a tu trabajo con hambre de solidaridad. Relaciónate con tus hermanos con hambre de fraternidad. Acoge las pruebas y los sinsabores con hambre de fe y acuéstate al finalizar la jornada con hambre de Dios. Ya verás como acabarás dándote “un atracón” de amor, de Amor del bueno.

Reza. Cierra las puertas de la desidia, de los ruidos, de las prisas... Y, ahí, en lo escondido, en el interior de tu corazón ama, ora y habla a Dios de los hombres y a los hombres de Dios; pues nada sabe de oración el que no ama y nada sabe de amor el que no ora.


Escucha. Precisamente porque Dios te ha dado una boca y dos oídos, escucha el doble de lo que hablas. Pon “a cuarentena” tu lengua y escucha la hermosa melodía que Dios, a través de las ondas de tus hermanos, pone todos los días en tu corazón.

Santifícate. Dios, a través de este tiempo de gracia, te envía un mensaje: “La cruz es ante todo una declaración de amor.” A pesar de que haya gente a tu alrededor que siga prefiriendo un cristianismo de butaca, tú apuesta por un cristianismo de cruz. Recuerda que una persona santa no es aquella que nunca cae, sino la que siempre se levanta.

Mira. A tu alrededor. No es la cuaresma un tiempo para caminar solo. A tu lado, Jesús sigue cayendo una y otra vez bajo el peso de la cruz. Sólo los que tienen ojos pueden ver las necesidades de los otros y convertirse en cireneos de tantas personas que siguen recorriendo el camino del Calvario un día sí y otro también.    

Ama. Pues sin amor despídete de entender a Dios, porque Él es eso, precisamente Amor. Combate las dudas, los fracasos, las cruces, el dolor... a base de amor. No olvides que si sufriendo se aprende a amar, amando se aprende a sufrir. Si amas, la Pascua, la resurrección, la dicha de un Dios-Amor brotará, y de qué forma, en tu vida y en la de tus hermanos… ¡Haz la prueba!


miércoles, 21 de marzo de 2012

¡Soy todo tuyo, Reina mía, Madre mía y cuando tengo tuyo es!

¡Virgen,
Madre de mi Dios,
haz que yo sea
todo tuyo!
Tuyo en la vida,
tuyo en la muerte,
tuyo en el sufrimiento,
tuyo en el miedo
y en la miseria,
tuyo en la cruz
y en el doloroso
desaliento,
tuyo en el tiempo
y en la eternidad.
Virgen,
Madre de mi Dios,
¡haz que yo sea
todo tuyo!.
Amén.

                                                                                                               

 

domingo, 11 de marzo de 2012

Los pilares de la Cuaresma: oración, limosna y ayuno.


Durante la cuaresma se nos recuerdan estas verdades que debemos vivir siempre:

ORACIÓN Al sabernos amados de Dios deseamos corresponder, alabar a Dios y pedirle que tome el trono
de nuestra vida. Meditamos la palabra de Dios de cada día, celebramos la santa Misa, nos confesamos. 

"Y cuando oréis, no seáis como los hipócritas, que gustan de orar en las sinagogas y en las esquinas de las plazas bien plantados para ser vistos de los hombres; en verdad os digo que ya reciben su paga. Tú, en cambio, cuando vayas a orar, entra en tu "cuartito" y, después de cerrar la puerta, ora a tu Padre, que está allí, en lo secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te dará de Sí" (Mateo 6,5-6)

LIMOSNA: Los cristianos llamamos "limosna" al compartir con los mas pobres nuestros bienes. No debe ser un aporte de lo que sobra sino un acto de amor hecho de corazón, un compartir que nos mueve a renuncia y al sacrificio. Todo viene de Dios como don. Toda nuestra vida debe convertirse en una dádiva de amor en imitación a Cristo.

         "Por tanto, cuando hagas limosna, no lo vayas trompeteando por delante como hacen los hipócritas en las sinagogas y por las calles, para ser honrados por los hombres; en verdad os digo que ya reciben su paga. Tú, en cambio, cuando hagas limosna, que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha; así tu limosna quedará en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará". (Mt 6,1-4)

AYUNOCristo ayunó para darnos ejemplo. Ayunamos como sacrificio ofrecido a Dios y para ganar domino sobre las pasiones y las tendencias de la carne. Con el ayuno nos ejercitarnos. Nos recordamos de los que pasan hambre y nos hacemos solidarios. 

         "Cuando ayunéis, no pongáis cara triste, como los hipócritas, que desfiguran su rostro para que los hombres vean que ayunan; en verdad os digo que ya reciben su paga. Tú, en cambio, cuando ayunes, perfuma tu cabeza y lava tu rostro, para que tu ayuno sea visto, no por los hombres, sino por tu Padre que está allí, en lo secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará." (Mt 6,16-18)